sábado, 11 de octubre de 2025

PERÚ: La espiral de la crisis política desencadena la BARBARIE

 

                                                         Foto proporcionada por el autor




P
erú se precipita en una debacle política total tras la fulminante destitución de la repudiada presidenta Dina Boluarte por un Congreso de la República sumido en el desprestigio y movido, una vez más, por intereses puramente electorales.

La crisis, largamente incubada, estalla en un país colapsado por una creciente ola de violencia y un crimen organizado que ha logrado una captura sin precedentes del aparato estatal. La incapacidad del Ejecutivo para enfrentar esta emergencia fue el detonante final que el Legislativo, desesperado por un salvavidas político de cara a las elecciones de 2026, utilizó para ejecutar una nueva «vacancia exprés».

Un nuevo presidente con sombra de impunidad
En medio de este caos institucional, el hasta ahora desconocido presidente del Congreso, José Jerí, asume la Presidencia de la República. Su ascenso al poder interino no hace más que profundizar la sensación de barbarie política e impunidad que carcome a la clase dirigente.

Jerí, un político con un perfil bajo hasta su elección como líder del Parlamento, ha sido inmediatamente recordado por una denuncia de violación presentada por una trabajadora del Congreso antes de que asumiera ese cargo en el 2025. Aunque la Fiscalía archivó la investigación por falta de evidencia meses después de la denuncia, el hecho de que su ascenso se haya producido a pesar de la gravedad de la acusación, y con la evidente protección de sus colegas diputados, es visto por la opinión pública como una señal inequívoca de que los congresistas operan en un sistema de impunidad total.

El ajedrez del Congreso y el colapso ciudadano
Esta nueva sucesión presidencial es percibida como la enésima movida en un cínico ajedrez político donde los congresistas se dedican a colocar y destituir presidentes según sus intereses y cálculos políticos más inmediatos, buscando posicionarse o ser «premiados» en las próximas contiendas electorales.

Mientras la clase política se atrinchera en sus privilegios y continúa con su ciclo destructivo, la población peruana se encuentra abandonada y a la deriva. La ciudadanía se ve obligada a defenderse del crimen organizado y, paradójicamente, de un Estado fallido que ha sido capturado y deslegitimado por sus propios líderes. En las calles, la lucha diaria por la supervivencia y la seguridad se ha convertido en la única y verdadera realidad de un Perú exhausto y al borde del abismo.

 


No hay comentarios.:

PERÚ: La espiral de la crisis política desencadena la BARBARIE

                                                            Foto proporcionada por el autor P erú se precipita en una debacle política tot...